El rock tiene deudas impagables y una de ellas es con Kansas. La banda, con su mezcla única de rock progresivo y contundencia, se ha ganado un lugar en el olimpo de la música. Ahora, con más de 50 años de carrera, anuncian lo que será su última presentación en México. La cita es el próximo 7 de febrero de 2026 en el Velódromo Olímpico y la noche promete ser un evento histórico, un adiós en toda regla.

Para ir calentando motores y preparar la garganta, nos clavamos en su discografía para rescatar esas cinco joyas que son indispensables. Esas canciones que, si no suenan esa noche, algo habremos hecho mal como público. Sube el volumen, que este es un viaje por la discografía de una banda monumental.

El soundtrack de una vida en cinco actos
Seleccionar solo cinco temas de Kansas es una misión casi imposible, pero aquí están las rolas que, creemos, encapsulan su poderío y su alma.
1. “Carry On Wayward Son”
No hay otra forma de empezar. Este es, sin duda, el himno por excelencia de Kansas. Desde el primer momento con ese coro a capela, sabes que estás ante algo grande. La potencia de sus riffs y la complejidad de su estructura la convirtieron en una pieza fundamental del rock de estadio. Escucharla en vivo es una experiencia que todo fanático del rock debe vivir. Es energía pura, un clásico instantáneo que sigue reventando bocinas décadas después.
2. “Dust in the Wind”
Aquí es donde Kansas demostró su increíble versatilidad. Pasaron de la opulencia del rock progresivo a una balada acústica, íntima y con una letra que te pega directo en el pecho. “Dust in the Wind” es poesía hecha canción. Su melancolía y su belleza acústica la convirtieron en un éxito mundial que trascendió géneros y generaciones. Una de esas rolas que te hacen reflexionar y que, en un concierto, crea una conexión única entre miles de personas.
3. “Point of Know Return”
Una canción que muestra la destreza técnica de la banda en su máxima expresión. Con un violín eléctrico que se roba el protagonismo y una letra que juega con lo desconocido, este tema es Kansas en estado puro. Es compleja, pegajosa y llena de una energía arrolladora. La canción que le da título a uno de sus álbumes más celebrados es una muestra perfecta de cómo hacer rock progresivo accesible y emocionante.
4. “Song for America”
Para los que aprecian el lado más épico y elaborado de la banda. Esta es una composición larga, llena de pasajes instrumentales, cambios de ritmo y una narrativa que recorre la historia. Es un viaje musical en toda la extensión de la palabra. “Song for America” es la prueba irrefutable del virtuosismo de cada uno de sus integrantes. Una pieza que demanda atención y que recompensa con una experiencia sonora de otro nivel.
5. “The Wall”
Una canción potente y emotiva que muchas veces queda a la sombra de sus más grandes éxitos, pero que posee una fuerza tremenda. Con una interpretación vocal impecable y arreglos que construyen una atmósfera densa, “The Wall” explora temas de aislamiento y anhelo. Es una de esas joyas ocultas que los verdaderos conocedores aman y que demuestra la profundidad lírica y musical que la banda es capaz de alcanzar.
El escenario está listo para que una de las bandas más grandes del rock se despida de su público mexicano. La noche del 7 de febrero en el Velódromo Olímpico será un recorrido por la nostalgia, la potencia y el legado de Kansas. Asegura tu lugar en la historia.